Según el Instituto Americano del Estrés, el trabajo es la causa más importante de estrés para los adultos. Esa es una estadística que parece sorprendente, pero realmente no lo es.
Con demasiada facilidad, los momentos de ansiedad y estrés pueden abrumarnos y hacernos sentir que nuestro mundo se derrumba alrededor de nuestros oídos.
Este sentimiento no sólo pasa en los grandes momentos que cambian la vida. También ocurren en cualquier situación durante el día, cuando nuestro sentido del equilibrio o el bienestar se desvían hacia la angustia o la ansiedad.
Entonces, ¿Cómo calmarse en momentos de estrés?
Como bien dice el dicho, “lo que resistes, persiste”. Cuando surgen emociones de angustia, estrés, ansiedad, la vía más rápida es también la más sencilla: Observar la emoción sin juicio y con atención.
Aquí te muestro algunos otros consejos tangibles que puedes usar la próxima vez que sientas estrés en el trabajo:
1. Reconocer el estrés cuando está sucediendo
Permítete reconocer cuándo sientes estrés. Nómbralo e identifica lo que estás sintiendo y dónde. Por ejemplo: “Me siento estresado; mi cuello se está tensando. Me siento ansioso; me duele el estómago. Me siento agitado; tengo las piernas inquietas”.
Nombrar la emoción y observar dónde ocurre físicamente es una forma de usar la atención plena o “mindfulness” para entrar en la conciencia y salir de la intensidad del estado emocional.
2. Obsérvate a ti mismo sin juzgar
Al reconocer cómo te sientes, tómate un momento para mirarte a ti mismo como lo harías con un querido amigo. Obsérvate a ti mismo con amabilidad y compasión, no con juicio.
3. Respira
Practica la pausa: respira lenta y profundamente y exhala lentamente. Repite cuatro o cinco veces. Presta atención a tu respiración y cuenta el número de respiraciones. Nuevamente, esta técnica te saca de la intensidad de tus sentimientos estresantes.
Ahora, cuando vuelvan las preguntas ¿qué hago con este estrés?, ¿cómo puedo trabajar más tranquilo?, ¿qué puedo hacer para calmarme?, ya tienes las respuestas. ¡Después me cuentas como te va!