¿Cómo estuvo hoy tu tiempo de descanso?
Muchas veces, durante el día, por ese pensamiento de:
“tengo-que, tengo-que, tengo-que”
Todos en algún momento
No nos permitimos hacer en ningún momento algo que literalmente “nos provoque”, y hasta nos sentimos culpables por ello. Al contrario de contribuir a tu productividad, no permitirte hacer algo que TÚ estás decidiendo (entendiendo que la mayoría de tus tareas del día no son del todo impuestas por ti) genera más carga y esa sensación de que no te estás poniendo de primero.
Invierte entre 10 y 15 minutos del día para hacer algo que TÚ quieres: sentarte a ver algún programa, leer un libro, comerte un snack, o simplemente quedarte sin hacer nada, porque así lo quieres.
Esta simple acción te va a llevar a sentirte aliviado y más en control de tu día y tu tiempo. Que por lo menos una pequeña parte de tu agenda esté definida por ti, hace una gran diferencia.
Pruébalo hoy y compártelo a otros.
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